Dado los altos riesgos para los obreros que presenta la industria de la construcción, la Seguridad es un tema de vital importancia para el Suntracs. No ha sido una lucha fácil, la misma ha costado vidas de compañeros obreros.
El 12 de febrero de 2008, en medio de la lucha por el Reglamento de Salud y Seguridad en la Construcción, un miembro de la policía nacional asesinó, en la provincia de Colón, al dirigente del SUNTRACS, el compañero Al Iromi Smith, otros obreros resultan gravemente heridos y se producen cientos de arrestos.
Es la fuerza del sindicato en las calles la que logra que el Gobierno se vea obligado a promulgar dicho reglamento, se cuente en las obras con oficiales de seguridad y planes de seguridad, sin embargo, continúan los accidentes y muertes en las obras, entre otras cosas, como consecuencia de los débiles procesos de fiscalización que deben realizar instituciones como Mitradel y la CSS, labor que muchas veces es asumida por el sindicato.