Siete temas cruciales para el pueblo panameño fueron colocados en lo que han llamado debates presidenciales, lo decimos porque la estructura del formato daba poco tiempo para abordar problemas tan profundos que vive el pueblo panameño, como lo es el desempleo, la seguridad social, la educación, la inseguridad ciudadana y el desarrollo sostenible.
Prevaleció en la propuesta de “más de lo mismo” la demagogia, pues todos han sido gobierno y ninguno resolvió los problemas de las mayorías. La propuesta del Plan para la Vida Digna, se consolidó como propuesta distinta, integral, como la única alternativa
Como era de esperar, se presentaron dos propuestas: la de más de lo mismo y el Plan para la Vida Digna.
Prevaleció en la propuesta de “más de lo mismo” la demagogia, pues todos han sido gobierno y ninguno resolvió los problemas de las mayorías, por el contrario, se ha incrementado la exclusión, marginación, pauperización y la pobreza. Han sido responsables del desempleo, la informalidad, la inestabilidad laboral y los bajos salarios; lo que han fomentado es empleo precario, tal como lo denomina la OIT.
En el tema de la seguridad social son partícipes del aumento de edad para jubilarse, aumentar la densidad, aumentar las cuotas y reducir el monto de las pensiones (las conocidas paramétricas) además de privatizar fondos y activos de la Caja; quedando develado: 1) La ley 51 hizo recaer sobre los trabajadores el costo de los atracos cometidos contra la institución por parte de políticos corruptos y empresarios codiciosos que no entregan la cuota a la Caja, y, 2) Negar que voceros que integran sus equipos de campaña están a favor de las medidas paramétricas y privatización de fondos a pesar de las evidencias.
En cuanto a la educación, ninguno la puso como derecho fundamental, valoran la misma como mercancía.
En inseguridad ciudadana no plantearon el caso de los delincuentes de cuello blanco, de la mora judicial, de la justicia selectiva; al mismo tiempo que insistieron en nombrar más policía, pese a que esta ha sido una política fracasada.
En el desarrollo sostenible son responsables de la devastación ambiental por su modelo de crecimiento económico que prioriza la ganancia y no la vida; todos son pro mineros. Se acusaron mutuamente de los desmanes cometidos por ellos cuando han sido gobiernos.
La propuesta del Plan para la Vida Digna, se consolidó como propuesta distinta, integral, como la única alternativa. En el tema del desempleo estableció la necesidad de una política nacional de empleo que permita generar empleo digno con salario justo, donde prive la estabilidad laboral, el pago de prestaciones y que se propenda a la vida digna; generación de empleo a través del fomento de las áreas productivas, en el ecoturismo cooperativo, en la biotecnología, promoción de la micro y pequeña empresa, incorporación de los informales a la cadena de valor agregado.
En el tema de inseguridad ciudadana destacó el hecho de la afirmación “la solución no puede ser convertir a Panamá en una cárcel”, plantearon un nuevo Estado que acompaña y protege a las comunidades con cultura y deporte, educación y ciencia, espacios públicos; un nuevo Estado que protege a la niñez y a las mujeres de la violencia; comunidades que participan en la solución de los problemas con inversión local que les permite fuentes de empleo; llamó a la prevención y se comprometió a que no habrá impunidad para los criminales de cuello blanco.
En el tema de desarrollo sostenible, no puede haber vida digna y desarrollo sostenible con proyectos que destruyen el ambiente y políticos vende patria; llamó a la protección de la vida por encima de la ganancia, a la relación armónica entre seres humanos y naturaleza, a la protección de nuestra riqueza natural.
Sobre la educación, un planteamiento claro del derecho a educarnos, a la educación gratuita desde maternal hasta la educación superior, a dotar los planteles con el material didáctico y útiles necesarios, infraestructura moderna, una educación para el desarrollo nacional y social, para la plena realización de las personas, se puso el punto de la causa de los problemas educativos, la desigualdad social: “ni el mejor educador, ni el mejor alumno pueden cargar con la miseria”.